El Gobierno, a través de su presidente, Mariano Rajoy, ha advertido “mire ushted, lealmente” a los ciudadanos catalanes de que, en el caso de que los partidos secesionistas consigan la mayoría en las elecciones de este domingo, declaren unilateralmente la independencia y fuercen la salida de Cataluña de España, “por sentido común, perderían automáticamente su condición de socios del Círculo de Lectores y tendrían que volver a pedir que les hiciesen el carnet, y mientras tanto seria incomodísimo para ellos tener que salir a la calle a encargar libros a una librería y los agentes del Círculo de Lectores tendrían que volver a ir a sus casas a tomar de nuevo los datos y eso de abrir la puerta a cualquiera es un riesgo evidente, por muy menor que pudiera parecer, mire ushted lo que le digo”.
En este sentido, el madrileño (!) Raül Romeva, número uno (¡ja!) de la candidatura de unidad secesionista, Junts Pel Sí, ha asegurado a preguntas de un periodista documentado de la BBC que “eso no lo sabíamos”, y que “es algo importante con lo que no contábamos, la verdad”, por lo que “lo mismo es la hora de recular, desandar lo andado, dejar la política y buscarse un trabajo de verdad”.

A este respecto, los independentistas de la CUP han mostrado su “profundo malestar por el uso que hace el Gobierno del discurso del miedo”, pero han rechazado la idea de dejar la política y ponerse a trabajar. “Y mucho menos un trabajo decente, que en esos se cobra poco y se suda mucho, y cuando David Fernàndez se pone a sudar, las alpargatas se le encharcan y aquello fermenta y no es muy agradable”.